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Relevo de villano

Por supuesto, habrá relevo de modos y mandos…

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Tigres de papel

Por Francisco Javier Mares

Por fin, el Ejército Mexicano capturó a José Antonio Yépez Ortiz, ‘El Marro’, cabeza del Cártel de Santa Rosa de Lima, organización criminal de cuño guanajuatense.

Robo y tráfico de combustible de los ductos de Pemex, asaltos carreteros, homicidios, narcomenudeo, secuestros y extorsiones sus actividades delictivas, a decir de la autoridad.

La región Laja-Bajío del estado -Celaya y sus zonas metropolitanas y de influencia-, su centro de operaciones indiscutible.

Que lo detuvieron la madrugada de este domingo -a esa hora en ese día cualquiera se descuida-, en un refugio suyo en el municipio de Santa Cruz de Juventino Rosas -su cuna-. En la operación, tras una resistencia breve, rescataron a una empresaria de Apaseo el Alto, avecindada en Querétaro. Sería llevado en helicóptero al penal del Altiplano, en el Estado de México, donde lo reclama un juez federal.

En la acción, acompañada por las fuerzas estatales, se cumplimentaron órdenes de aprehensión por los delitos federales de robo de hidrocarburos y delincuencia organizada.

Evidentemente, el gobernador Diego Rodríguez, pidió mano para el anuncio:

“Quiero informarles que esta madrugada en un operativo conjunto entre Fuerzas Estatales y Federales fue detenido el principal líder de un grupo criminal que operaba en la región Laja-Bajío del Estado de Guanajuato”, escribió en Twitter a las 07:34 horas.

Enseguida, Alfonso Durazo, el secretario federal de Seguridad, en un hilo de tres:

“Hoy en la madrugada, en una acción encabezada por el Ejército Mexicano y apoyada por la @FGEGUANAJUATO, fue detenido José Antonio “N”, también conocido como “El Marro”. En este momento se encuentra a disposición de la autoridad judicial local. 1/3

“En este evento fue rescatada una persona secuestrada. Cubiertas las formalidades jurídicas será trasladado al CEFERESO del Altiplano para ponerlo a disposición del juez federal que dictó orden de aprehensión por delincuencia organizada y robo de combustibles. 2/3

“El Gabinete de Seguridad reconoce el gran apoyo del @gobiernogto, la @FGEGUANAJUATO y la @FGRMexico”.

Luego, todos los demás.

Si en el imaginario colectivo guanajuatense la detención de don José Yépez acaba con la violencia de la delincuencia organizada en el estado, es muy probable que se equivoque -a ese mismo imaginario colectivo lo nutren un sinfín de mensajes de un voluntarismo optimista casi tierno desde el momento del anuncio, pero eso no importa demasiado.

La captura de ‘Rl Marro’ tendrá consecuencias sí, en la dinámica de la violencia en Guanajuato; en la percepción momentánea de la inseguridad en la opinión pública; y hasta en la lectura de las relaciones de los gobiernos del estado y federal -muy lastimaditas a últimas fechas-, pero no da para tanto.

Por supuesto, habrá relevo de modos y mandos:

Uno. Al interior del Cártel Santa Rosa de Lima -de inspiración en los mariguaneros de los 80′, más como un emporio familiar- a pesar de que uno de sus propios videos retrata a ‘El Marro’ harto desmejorado, habrá otro quien ocupe su lugar -así suene a tonada-, y, fragmentado, su acción derive en acciones menos espectaculares pero no menos lesivas a la comunidad, acaso todavía más violentas.

Y dos. Más grave: también en los videos en la cartelera de las redes, ya el Cártel Jalisco Nueva Generación, de Nemesio Oseguera Cervantes, ‘El Mencho’, había anunciado su arribo a ‘la plaza’…, y la caída de ‘El Marro.’ A la guerra sostenida por ambas organizaciones se atribuye la escalada de la violencia criminal en Guanajuato en los años recientes. En 2019 se cometieron en el estado 3 mil 540 homicidios dolosos.

Un respiro en la presión social:

El asesinato a cinco personas en un centro de verificación de vehículos en Celaya y, sin precedente, la muerte de 28 jóvenes acribillados a tiros en un ‘anexo’ de Irapuato, hechos de una violencia inusitada, adjudicados ambos al grupo de Yépez, hundieron en el descrédito absoluto la pretendida estabilidad de Guanajuato.

Es de anticipar que de Silao a los Apaseos -tranco largo del corredor industrial de la entidad y nicho de las inversiones extranjeras, señaladamente de la industria automotriz-, tanto en el hombre de la calle, como en los capitanes de empresa y en las representaciones de marca se atempere la percepción de inseguridad, aunque no sea por mucho tiempo, ni necesariamente espejo de la realidad -tampoco hay que restar mérito al empeño propagandista.

Y un ‘tiempo fuera’, en el desencuentro Diego-AMLO.

Resulta que al pez ‘Marro’ lo atrapan en las aguas revueltas de las relaciones del Gobierno del estado y el Gobierno federal. Diego Rodríguez no desdeña posibilidad de bronca alguna con Andrés Manuel: el reclamo de la revisión fiscal a las participaciones federales; la embestida al subsecretario de Salud Hugo López-Gatell; ese acompañamiento raro a cuanta locura germina en la cabeza del gobernador jalisciense, Enrique Alfaro…

‘El Marro’ es capturado a unas cuantas semanas de la visita del presidente a Irapuato, a donde acudió a sopesar personalmente las reservas del Fiscal federal Alejandro Gertz Manero, respecto al actuar de Carlos Zamarripa; escuchar las cuitas del gobernador; y conceder una tregua en el asedio a la permanencia al Fiscal guanajuatense, así que más allá del orden de aparición de los logos y los nombres de las instituciones en la acción, los que siguen serán días de loas a la coordinación y al apoyo y…

José Antonio Yépez Ortiz, ‘El Marro’ y su Cártel de Santa Rosa de Lima transitaron tan campantes el sexenio del gobernador Miguel Márquez Márquez -toda la ruta con dos funcionarios que prevalecen, el secretario de Seguridad, Alvar Cabeza de Vaca Appendini y el Procurador/Fiscal, Carlos Zamarripa Aguirre-, sin que les molestaran más allá de los discursos y las declaraciones a la prensa -la responsabilidad es del gobierno federal, machacó hasta su ida Márquez.

Mientras, ‘El Marro’ crecía: de unas pocas tomas clandestinas en 2014, hasta superar las mil en 2018, fin del sexenio. De la osadía empírica al desplante de ingeniería en el saqueo. Su suerte comenzó a cambiar cuando Andrés Manuel López Obrador decidió atajar el robo de combustible a los ductos de Pemex -‘huachicoleo’, para los iniciados-, pese al costo político de la crisis en el abasto de gasolina. ‘El Marro’ -como sucede al resto de las organizaciones criminales-, se vio obligado a diversificar sus fuentes de ingresos.

Nada qué inventar: los secuestros, el narcomenudeo, el asalto al transporte de carga, fueron su paliativo. Las extorsiones cayeron como plaga sobre los habitantes de Celaya. El despropósito de asolar a las tortillerías, fue toda una sorpresa nacional. Así, hasta ahora que por fin, una acometida federal -a AMLO no se le dan mucho-, entregó buenos dividendos y José Antonio Yépez Ortiz -diría el clásico-: ‘ya se encuentra tras las rejas’.

¿Qué sigue? Bueno, pues el desahogo del proceso judicial -ánimas que sin sorpresitas como en el arresto a su señora madre-; declaraciones, declaraciones, declaraciones…, y a ver qué nuevas trae para Guanajuato el ‘Cártel Jalisco Nueva Generación’.

(A) LA JAULA

El secretario de Educación, Esteban Moctezuma.

Este lunes ‘la mañanera’ está dedicada a los entretelones del regreso a clases. Es de esperar que esta vez el titular de la cartera ya tenga formas y fechas claras. Tampoco es una certeza. Como sea, preguntarán a AMLO sobre la acometida de 9 gobernadores -incluido Diego Rodríguez-, al médico López-Gatell. Quieren que renuncie. A ver qué dice el presidente. Lo otro es cambiarle a ‘Hoy’.

Correspondencia: [email protected]

Twitter: TigresDePapel

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