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‘Corona-mitos’
Los ciudadanos se enamoran de las teorías de la conspiración. Campea el desorden. Y apunta para peor…
Por Francisco Javier Mares
El covid-19 ha arrebatado 312 mil 029 vidas en los cinco continentes. En México, 5 mil 177 defunciones confirmadas. En Guanajuato, 77. Aún así, periodistas, políticos y gobernantes desinforman y medran. Los ciudadanos se enamoran de las teorías de la conspiración. Campea el desorden. Y apunta para peor.
Whatsapp trajo un audio que invita a una ‘Fiesta covid’ el próximo sábado en algún lugar de la Ciudad de México. Acudirían personas contagiadas para que, a su vez, infecten a otras con la intención de generar ‘inmunidad de rebaño’. Según el mensaje, la Organización Mundial de la Salud recomienda este recurso.
El doc Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, francamente se enojó. “Es un despropósito. Nos parece sumamente peligroso. Es absurdo pensar que, deliberadamente, uno puede provocar infecciones para alcanzar la inmunidad”, dijo.
Ya la OMS advirtió de lo que llama infodemia. La desinformación que se propaga más rápido que el propio virus. La humanidad no había enfrentado una pandemia con las posibilidades de difusión y conexión de ahora. Pero no. Por interés o mera ignorancia, el mundo sucumbe a la conspiración…
“Aviso importante. Me acaba de avisar una amiga enfermera que trabaja en el Seguro Social que el gobierno piensa hacer una campaña de vacunación para supuesta protección contra el covid-19 pero es pura farsa, solo van a estar inyectando el virus para que se infecte la nación así que por nada se dejen vacunar hasta están ofreciendo dinero”, ilustra otro mensaje de Whatsapp.
Con una aspirina. “Si llegan a contraer el tal covid-19. El cual no es un virus como nos han hecho creer, sino una bacteria amplificada con radiación electromagnética 5G, hacer lo siguiente: tomar Aspirina de 100mg con limonada caliente cada 8 horas. Quieren poner el chip a través de la vacuna y asesinar a las masas para controlar y reducir la población mundial…”, uno más.
La 5G. La enfermedad es real pero no la causaría un virus sino las redes celulares 5G. La falsedad afirma que 5G puede inutilizar al sistema inmune, y que la gente sea más susceptible a contraer el virus. Eso es una «basura total», enfurecen los científicos.
Los aviones. Esa versión trae la de los ‘chemtrails’, las estelas que dejan y con las que rociarían con agentes químicos a la humanidad. Este ‘polvo inteligente’ serviría para controlar remotamente el virus, después de que fuese implantado en la población china a través de vacunas obligatorias.
Un arma biológica. Habría sido diseñada para acabar con cierto porcentaje de la población. Que lo inventaron en Wuhan para reducir la población de ancianos, pero se salió de control.
El soldado yanki en China. Que lo envió Donald Trump para dañar con el virus la fortaleza de esa nación como potencia mundial.
Bill Gates. Lo que pasa es que el hombre más rico del mundo es el creador de esta enfermedad. Hasta es el propietario de la patente para estudiarla.
El murciélago. Algunos científicos lo señalaron como culpable del origen del coronavirus, pero esa hipótesis ni siquiera se ha comprobado.
Pinky y Cerebro en China. China habría ‘desatado’ el virus, de manera controlada para después ‘apoderarse del mundo’ vía la compra de acciones baratas por la recesión que generaría el virus.
La venganza de la naturaleza. Inició en China porque comen todo tipo de animales. Debido a esto la naturaleza se defendió con un virus mortal.
Cada una de las teorías, por supuesto, trae consigo la cura que iría desde tratamientos propios, bañarse en cloro, apagar los dispositivos electrónicos, evitar las telecomunicaciones… o comer plátanos.
ENTRE LA ESPADA Y LA TRIBUNA
En Venezuela, el presidente Nicolás Maduro sugirió que el virus es un arma biológica estadounidense contra China.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, promueve tratamientos no comprobados contra el coronavirus.
El presidente de EU, Donald Trump, hace lo propio -como inyectar desinfectante-, a pesar de las advertencias de los científicos.
México no los deja solos.
Con la nube negra de la pandemia encima, el presidente Andrés Manuel López Obrador, repartía abrazos y besos en las plazas públicas.
Su compañero de partido, Miguel Barbosa, gobernador de Puebla, sostuvo que los pobres son inmunes al covid-19, enfermedad de ‘gente rica’ que podía viajar.
Los gobernadores panistas -capitaneados por su muy lamentable líder nacional Marko Cortés-, van de un traspié mediático a otro en sus reclamos propagandísticos.
Y así están el perredista -cualquier cosa que ello signifique aún- Silvano Aureoles, en Michoacán; Enrique Alfaro, señor feudal de Jalisco; o el ahora muy retraído y rebasado en Nuevo León, Jaime Rodríguez… -la paranoia y los abusos de otras representaciones populares serían materia de ensayo, no de columna-.
Las consecuencias de la desinformación serán graves siempre. En el caso del coronavirus son la pérdida de la confianza pública, el menoscabo a las autoridades sanitarias y el aumento de contagios. Creerse poseedor de un conocimiento clasificado da la sensación de voluntad propia. La sensación de seguridad es una ilusión, el saldo es real.
Que gobiernos, políticos y medios hagan ‘manita de puerco’ a los hechos, lleva al caos. O buscan ocultar su incompetencia o ‘llevar agua a su molino’ o protegen sus intereses. Todos evaden su responsabilidad.
En México, el Consejo Nacional de Salubridad y las precisiones de López-Gatell, han puesto a los gobernadores ‘entre la espada y la tribuna’. A partir del 1 de junio, las decisiones de control de movilidad de las personas serán de su absoluta competencia. No lo son ahora -menos, de los alcaldes-, aunque así lo crean e interpreten a conveniencia. A partir de junio, si juegan para la hinchada pagan el costo.
Parece que el doc Gatell se cansó de ser el pararrayos de la oposición política y de los grupos de presión de siempre. Entrega los formatos de respuesta a los gobiernos estatales. La Federación se queda con el diagnóstico y la asesoría. Nada más.
LA JAULA
‘Sandalias Aztlán’ de ‘Grupo Flexi’, a sus trabajadores.
“León GTO, a 15 de mayo de 2020. COMUNICADO OFICIAL. “Se le comunica a todo el personal que labora en esta empresa SANDALIAS AZTLÁN S.A. de C.V. que debido a la situación sanitaria y atendiendo las indicaciones del Gobierno federal y estatal, estaremos reanudando labores el 1 de junio del 2020 en el horario habitual de 07:30 a.m…” ¿De plano? ¿O sea, así cómo?
Correspondencia: [email protected]
